Desde el centro asistencial expusieron que bajó el promedio de edad de los pacientes internados y pidieron a la gente mantener los cuidados, incluso una vez vacunados.
El jefe del área COVID de la Clínica Fátima de Pilar, Emiliano Delafosse, advirtió que, al igual que ocurre en otros efectores privados de la salud de la zona, el nivel de ocupación de camas de terapia es total.
“Estamos completos y trabajando con la capacidad máxima. Hubo un par de altas pero ya hay nuevos ingresos. Día a día vamos viendo a aquellos pacientes que mejoran un poco para sacarlos a sala y así poder ingresar un paciente descompensado”, explicó Delafosse en una entrevista que concedió al programa radial Agenda Propia de FM Estudio 2 (105.9).
Otro dato que preocupa es la baja en el promedio de la edad de los pacientes que necesitan cuidados intensivos, algo que se atribuye a que se trata de población que aún no fue alcanzada por el plan de vacunación pero también a la virulencia de las nuevas variantes del coronavirus.
“El virus ha potenciado ciertas cuestiones. Lo que hoy vemos en imágenes pulmonares no lo veíamos el año pasado. Algunos ingresan con tres o cuatro días de síntomas y ya presentan imágenes severas”, consignó el médico, quien informó que tiene pacientes de entre 30 y 55 años de edad, y que incluso tuvieron a uno de 16 años.
“Se puede tener la mejor prepaga y de todas formas quedar librado a lo que está sucediendo para conseguir camas. Jugar con esa ruleta rusa, no es agradable para nadie. Estamos teniendo mucho paciente vacunado internado, hay que darle más tiempo a la vacunación. Sin dudas hay que vacunarse, sin especular con cuál. Pero luego hay que seguir con los mismos cuidados”, cerró.